Dos personas murieron por inhalación de monóxido de carbono en el Alto Valle
Las muertes ocurrieron en las últimas horas en dos viviendas de la región. ¿Qué recomendaciones y advertencias hay que conocer?

Redacción
Master Río Negro
Publicado el:
Lun 02 Junio 2025 22:50hs

Las muertes ocurrieron en las últimas horas en dos viviendas de la región.
Este lunes se confirmaron dos muertes por inhalación de monóxido de carbono en la región: una ocurrió en una vivienda de Allen y la otra en la calle Dante Alighieri. En ambos casos, las víctimas fueron halladas sin vida dentro de sus hogares, y los primeros peritajes indican que el gas tóxico habría sido el causante del fallecimiento.
Según informaron fuentes policiales, las viviendas tenían estufas o calefactores en funcionamiento. Las investigaciones quedaron a cargo de los gabinetes de Criminalística y Bomberos, pero todo apunta a una intoxicación por monóxido de carbono, un gas que no tiene olor ni color, y que puede causar la muerte en pocas horas si se lo inhala en un ambiente cerrado.
El monóxido de carbono (CO) se genera por la combustión incompleta de materiales como gas, leña, carbón o kerosene. Su peligrosidad radica en que es imperceptible al olfato y puede acumularse en ambientes mal ventilados, desplazando el oxígeno que necesita el cuerpo para funcionar. Produce síntomas como mareos, dolor de cabeza, vómitos, confusión, y en casos graves, pérdida de conocimiento y muerte.
En Argentina, se estima que cada año mueren unas 500 personas por intoxicación con monóxido de carbono, y más de 4.000 sufren consecuencias graves. Todas estas situaciones son evitables.
¿CÓMO PREVENIR UNA TRAGEDIA?
Ante la llegada del frío, los especialistas insisten en revisar los artefactos de calefacción antes del invierno y en mantener los ambientes ventilados. Las principales recomendaciones son:
-Abrir al menos una ventana 10 centímetros para permitir la renovación del aire
-Controlar estufas y calefones con gasistas matriculados.
-Verificar que la llama de los artefactos sea azul (si es amarilla o anaranjada, indica mal funcionamiento).
-No dormir con braseros o estufas a querosén encendidos
-Nunca usar el horno ni las hornallas para calefaccionar.
-Instalar detectores de monóxido de carbono.