Tras la muerte de su madre y el abandono del padre, la Justicia designó a una tía como tutora
La mujer los crió desde la muerte de su madre en 2018. El padre, ausente desde entonces, fue privado de la responsabilidad parental.
Redacción
Master Río Negro
Publicado el:
Mié 12 Noviembre 2025 11:54hs
Tras la muerte de su madre y el abandono del padre, la Justicia designó a una tía como tutora
Hace siete años, una mujer del Alto Valle tomó una decisión que le cambió la vida. Su prima hermana había fallecido en 2018, dejando a tres hijos una niña de 12 y dos adolescentes de 14 y 17 años sin madre y con un padre ausente que vivía en el campo. Sin dudarlo, la mujer abrió las puertas de su casa y su corazón para recibirlos.
Desde entonces, los tres hermanos encontraron en su tía el refugio y la contención que necesitaban. Compartieron hogar, escuela, rutinas y afecto, mientras el padre se mantenía distante, con contactos esporádicos y promesas de visitas que rara vez cumplía. La mujer asumió sola las responsabilidades cotidianas: su educación, su salud, su bienestar.
Con el paso del tiempo, la realidad afectiva y familiar se impuso. Este año, con el acompañamiento de la Defensora Pública, la tía presentó una solicitud formal ante el fuero de Familia de Cipolletti para obtener la tutela legal de los tres chicos. El objetivo era dar un marco jurídico a lo que la vida ya había establecido: que esos niños tenían en ella su figura de referencia y cuidado.
La Defensora de Menores también intervino en el caso y pidió al tribunal que se privara al padre del ejercicio de la responsabilidad parental, al constatar un abandono prolongado. Un informe social confirmó que los hermanos vivían en un entorno estable, con condiciones adecuadas y un fuerte lazo afectivo con su tía. “Antes los visitaba de vez en cuando y ahora ya no. Los chicos no quieren saber nada de su padre”.
Durante la audiencia convocada por la jueza, los tres hermanos fueron escuchados. Todos coincidieron en su deseo de continuar viviendo con su tía, expresando que se sentían cuidados, escuchados y contenidos. El padre, presente junto a una defensora oficial, no presentó objeciones.
Con esos elementos, el tribunal resolvió designar a la mujer como tutora legal de los tres hermanos. La resolución le otorga la facultad de representarlos en decisiones de salud, educación y actividades sociales, además de permitirle viajar con ellos fuera del país. En paralelo, el padre fue privado de la responsabilidad parental al considerar que se desentendió por completo de sus hijos.
El fallo se basó en el principio del interés superior del niño, contemplado en la legislación nacional y en los tratados internacionales de derechos humanos. “La tutela busca proteger de manera integral a quienes no tienen quien ejerza la responsabilidad parental”, sostuvo la resolución judicial, que reconoció en la tía la figura que, durante años, garantizó el amor, el cuidado y la estabilidad que los hermanos necesitaban.



